La diverticulitis es una inflamación de uno o varios divertículos (bolsas en la pared del instestino) causada por una infección.
En detalle
Nuestro intestino esta lleno de pequeños músculos con el objetivo de ir de moviendo los alimentos por nuestro sistema digestivo. El problema, es que al igual que cualquier otro músculo, estos pueden debilitarse. Por ello esta condición es más frecuente en personas mayores, ya que tienen músculos más frágiles.
Estos debilitamiento musculares son mucho más frecuentes en la zona del colon sigmoide. Es en estos puntos débiles, es donde pueden aparecer los divertículos.
No confundir
- La diverticulosis es la presencia de divertículos y no suele tener síntomas.
- La diverticulitis ocurre cuando se inflaman los divertículos. Es decir, no puede ocurrir la diverticulitis sin la diverticulosis.
La diverticulitis puede ser grave a cualquier edad, pero especialmente en los ancianos que toman corticosteroides u otros medicamentos inmunosupresores debido a que aumenta el riesgo de infección, incluida la infección de colon. Esta enfermedad es un fenómeno corriente en los países occidentales; más del 50% de las personas de más de 60 años la padecen.
Causa de la diverticulitis
La diverticulitis aparece cuando se producen pequeñas lesiones en la pared del colón. El estilo de vida sedentario, y una dieta muy pobre en fibra suelen ser las causas más comunes de diverticulitis.
Síntomas
Aunque los síntomas pueden no siempre estar presentes, cuando aparecen los más frecuentes incluyen:
- Dolor intenso en la parte izquierda inferior del abdomen.
- Sensibilidad del abdomen
- Fiebre
- Náuseas
- Constipado o diarrea
Otro síntomas menos frecuentes que pueden ocurrir son:
- Vómitos
- Hinchamiento de la barriga
- Presencia de sangre en el recto
- Necesidad de urinar más frecuentemente
- Dolor o dificultad para orinar
Cuando ir al médico
En caso de tener una fiebre de más de 38 ºC, dolor abdominal, náuseas, vómitos o diarrea, podría padecer diverticulitis y, por tanto, debería ir a consultar su médico.
Cómo disminuir los riesgo de padecer diverticulitis
- Realizar regularmente una actividad física
- Beber abundante agua
- Reducir el consumo de gases y carne
- Aumentar el consumo de fibras alimenticias (30 gr diarios)
- Ir al baño en cuanto tengamos la necesidad
Tratamiento
El tratamiento indicado para la diverticulitis consiste en mejorar nuestro estilo de vida (alimentación y ejercicio físico), acompañado de antibióticos para controlar la infección (no siempre necesarios) y analgésicos como el paracetamol para reducir el dolor.
En caso de que la diverticulitis pueda traer complicaciones debido a la presencia de una perforación o que los antibióticos no respondan correctamente, la cirugía puede ser una solución. En cualquier caso, alrededor del 80% de los pacientes pueden ser tratados evitando la cirugía.